El efecto nebulizador se basa en transformar el estado líquido en aerosol o partículas pequeñas que ayuden a cumplir un determinado fin, ya sea doméstico o médico.
En este caso hablamos de un sistema de nebulización con fines médicos. Y es importante recalcar que su uso, por lo menos si se desea usar por primera vez, tiene que ser consultado anteriormente con un profesional de la salud. También tomando en cuenta si de verdad se requiere su uso dependiendo de la afección que queramos tratar.
Los nebulizadores que se utilizan en la medicina son aplicados principalmente para tratar afecciones respiratorias, ya sea para tratar las vías aéreas superiores o las vías aéreas inferiores. Dependiendo de cualquiera de los dos casos, se aplicará un tipo de nebulizador diferente. En este caso el nebulizador ultrasónico suele administrarse cuando hay afecciones en las vías aéreas superiores como la rinitis alérgica, rino sinusitis, o faringitis.
Funciones de un nebulizador ultrasónico
El nebulizador ultrasónico se utiliza para tratar enfermedades respiratorias en las vias aéreas superiores. Opera generando vibraciones de alta frecuencia y ondas de ultrasonido sobre la solución o medicina que se vaya a administrar. En este tipo de nebulizador suele administrarse el medicamento sin diluir, a diferencia del nebulizador a pistón que también se utiliza para tratar afecciones en las vías respiratorias. Dependerá del diagnóstico que haga su médico el tipo de nebulizador que se vaya a utilizar.
Este sistema genera partículas de mayor tamaño que los nebulizadores a pistón, y tienen capacidad de nebulizar grandes volúmenes de líquidos en cortos periodos de tiempo. La medicación es inhalada por el paciente y generalmente este proceso puede ser mucho más silencioso que el proceso que opera un nebulizador a pistón.
Este tipo de nebulizadores son todos portátiles, así que su traslado no requiere mayor esfuerzo. Para las personas que sufren constantemente de afecciones respiratorias es recomendable adquirir un aparato de este tipo, ya que es de fácil manejo y puede operarlo el mismo paciente o una persona común. Siempre antes consultando la dosis a administrar con su médico. No es recomendable, bajo ninguna circunstancia administrar este tipo de método sin la previa consulta con un profesional de la salud.
Este tipo de nebulizador fue inventado posteriormente al nebulizador a pistón. Aunque anteriormente se sugirió que el nebulizador a pistón y el ultrasónico tenían diferentes funciones, en la medicina no suele hacerse demasiada diferencia entre los dos para aplicar una medicación o incluso solamente aplicar solución fisiológica para despejar las vías respiratorias de nuestro cuerpo. Queda de parte del especialista sugerir qué tipo de método utilizar.
Partes de un nebulizador ultrasónico
Este tipo de sistema es desmontable y se conforma de distintas piezas que tienen cada una un fin específico para que todo el sistema funcione a la perfección. A continuación las piezas básicas que conforman la mayoría de los nebulizadores ultrasónicos.
- Compresor. El compresor de un nebulizador es la matriz de todo su proceso. Es donde se lleva a cabo las vibraciones de alta frecuencia que convertirán el líquido posteriormente en partículas de agua en forma de nubes. A este compresor se conecta un tubo de aire a través de su toma de aire.
- Tubo de aire. Esta manguerilla o tubo es desmontable y se conecta al compresor para ser el canal por donde se transportará el aire presurizado hacía nuestra taza donde se encuentra la medicina.
- Conectores del tubo de aire. Estos conectores irán en los extremos del tubo de aire y funcionarán para conectar el tubo al compresor y del otro lado a la taza o copa con la medicina.
- Copa o taza. Esta pieza consta de un recipiente donde va a colocarse la medicina liquida a administrar y la que al entrar en contacto con el aire presurizado, se convertirá en partículas pequeñas pulverizadas que a través de una máscara serán administradas al paciente.
- Boquilla o mascarilla. Esta mascara o boquilla será la pieza que conecte la taza con las vías respiratorias del paciente. Hay diferentes tipos dependiendo de si el paciente es un niño o es un adulto.
- Toma de corriente. En esta parte se suele recibir la corriente del cable de poder que va a tener incluido nuestro nebulizador.
- Interruptor de encendido. Este interruptor pondrá en funcionamiento el nebulizador y se mantendrá encendido durante todo su uso.
Recomendaciones
En condiciones normales y cuando este método se va a aplicar a una persona adulta, ésta debería estar sentada de manera cómoda y derecha. No sería el caso de una persona que está convaleciente acostada en una cama, de igual forma puede aplicarse el nebulizador.
La persona debe dedicarse sólo a respirar de manera habitual y evitar hablar durante la aplicación de la nebulización. Todas estas recomendaciones anteriores se aplican también cuando es necesario hacer una nebulización a niños pequeños. Lo importante es que durante los minutos que va a durar el proceso, el niño esté quieto y cumpliendo con respirar normalmente, sin hablar o llorar. Es comprensible que por ser un niño al que se le va aplicar este proceso, nos encontraremos quizás con resistencias. Está en nosotros o en otro caso del doctor, encontrar la manera de que el niño colabore. Podemos prometerle un premio o endulzarlo con alguna táctica lúdica y sobre todo hacerle saber que este proceso es indoloro y más bien va a hacerle mucho bien.
Si el niño es muy pequeño, se recomienda nebulizar en el regazo de la madre o cualquier otro adulto.
Ya sea que tengamos el nebulizador ultrasónico en casa o sea administrado en un consultorio médico, es importante mantener el aparato en óptimas condiciones de higiene. Es por ello que se recomienda después de su uso, desmontar todas sus piezas y limpiarlas, si se puede con material desechable. Las piezas desmontables pueden lavarse con agua caliente y jabón para posteriormente secarlas muy bien.
Luego que limpiemos nuestro nebulizador, es recomendable guardarlo en un sitio seco de nuestra casa o consultorio, donde no exista humedad.
Tomando en cuenta lo leído en el artículo, concluimos con que este instrumento es beneficioso y vale la pena tener uno en casa para emergencias.